La presente cavidad fue descubierta en el año 1992 por un grupo de escaladores, que practicando este deporte en el sector de Penya Senyal, decidieron investigar por la zona por si descubrían nuevos sectores donde emplazar mas vías y cual fue su sorpresa al toparse con el susodicho avenc.
Ya desde mis inicios en este maravilloso mundo que es la exploración del mundo subterráneo, Tony me explicaba que él conjuntamente con un compañero de fatigas llamado Amador, el cual era espeleólogo experimentado decidieron probar a ver que tal en este avenc y que tras los suplicios pasados por éste en la estrechez a escasos metros de la boca se le quitaron las ganas de repetir, además me imagino que condicionado por esa sensación me relató que tampoco tenia nada de especial, así como que percibió un tanto de falta de oxigeno y una tremenda calor.
No es de extrañar que haya tardado tanto tiempo en decidirme a probarlo, pues parece ser que por aquel entonces sus descubridores sufrieron para pasar la estrechez que comento que era de unos 17 cm aprox., a posteriori parece ser que este paso se ensancho quedando en la actualidad en unos 26 cm aprox., que te permite no entrar holgado, pero si al menos intentarlo.
Tras proponérselo repetidas veces a Tony y convencerlo, de que era una cavidad con posibilidades fotográficas y además que contaríamos con la inestimable compañía y colaboración de nuestra más reciente compañera de grupo María, accedió a realizarla.
Para su localización si provenimos del ámbito de Barcelona deberemos de tomar la C-32 dirección Sitges y salir en la salida última de Castelldefels, para incorporarnos a la C-245 por el lateral y entrar en la urbanización Garraf II que es la que se encuentra antes del Ratpenat, una vez en ella continuaremos por la calle de entrada hasta una bifurcación donde nosotros tomaremos dirección a derechas por una calle de doble sentido de circulación y con muy poco espacio para pasar dos coches, tenemos que ir subiendo hasta llegar a la última calle que no tiene salida C/ Eramprunyà, donde aparcaremos en batería en el margen derecho de la misma en un reducido aparcamiento frente a las viviendas.
desde este punto vemos un sendero de tierra que nace junto al asfalto y barrado con una cadena, seguimos senda de una forma un tanto intuitiva ganando altura hacia la derecha hasta sortear una pequeña grimpada que nos deja en una pista de tierra que a la derecha de esta divisamos un gran deposito de agua, y durante la ascensión de este corto tramo hemos dejado otro pequeño a nuestra izquierda.
Una vez en la pista debemos de seguirla hacia la izquierda bajo la línea eléctrica y obviando un desvío a derechas un poco mas adelante, y llegados junto a la pilona de una torreta eléctrica iniciar una grimpada por la derecha de la roca por la zona que mejor veamos hasta ganar la cúspide de la pared( sector de escalada Penya Senyal).
desde la cúspide progresamos cresteando un poco para ir mirando a la izquierda pues en la segunda canal debemos de desgrimpar para llegar a la boca que ya divisamos desde lo alto.
La boca es de dimensiones reducidas, dando paso a un tubo que en cuestión de 3 metros nos deja en el paso clave, que no es tan fiero el lobo como lo pintan, pues a ninguno de los tres nos costo superarlo, pero aquel que intuya que puede tener problemas siempre es bueno colocar el descensor en las bagas o inclusive no llevar instalado el croll, que podría ocasionar roces y dificultarnos la entrada.
Superado este obstáculo, que francamente me tenia preocupado, la primera sensación que tengo es de un calor agobiante, asi que si podéis no ir muy abrigados mejor, la cavidad desciende varios pozos de corta medida, al final de los cuales podemos contemplar buenas formaciones y tras las fotos de rigor a través de una ventana nos lleva hasta un pozo de 6 metros, desembocando este en otro de unos 14 metros al final del cual observamos un rincón altamente concrecionado y con formas bastante blancas, desde este punto no supimos encontrar la cabecera del último pozo de 15 metros, dividido en dos husos que conducen al mismo punto y montamos un natural para descenderlo a la antigua usanza.
Llegados al final, encontramos una salita a la cual se accede por un paso bastante angosto y que molesta al pasar pues la formación es bastante puntiaguda y donde veremos formaciones espectaculares con cambios de coloración formando "coliflores" que recuerdan al coral o tal vez a rocas marinas plagadas de percebes, en cualquier caso bien vale la pena detenerse a contemplarlos y sacar buenas fotos.
Desde esta salita podemos descender un tanto mas ya sin cuerda donde encontramos el punto mas bajo de la cavidad con algo de acumulación de barro dando a entender que tiene abundantes crecidas, prueba también de ello, es que la libreta de piadas que esta en un "Tapperware" está totalmente empapada.
Mencionar que para el descenso nosotros solo usamos una cuerda de 60 metros llegándonos perfectamente.
Haciéndome eco de la frase escrita en el "Tapperware" que menciono, no es el último rincón virgen del Garraf pero poco le falta, las formaciones están relativamente conservadas y realmente ha valido la pena visitarlo lastima que he tardado tanto, espero que a vosotros no os pase lo mismo.
Saludos.
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